Desde la asignatura de Religión hemos decidido apoyar la Operación Kilo. El reto es simple: cada alumno y/o profesor trae 1 kilo de alimentos no perecederos y, si todos colaboramos, llegamos sin problema a nuestra meta de 50 kilos. Fácil, ¿no?
Para hacerlo aún más cómodo, hemos colocado un punto de recogida en la entrada del centro. Solo hay que pasar, dejar la bolsa… y sumar un granito más a esta montaña solidaria.
¿Y todo esto para quién? Para Cáritas.
Cáritas es una organización que trabaja de forma transparente, cercana y muy seria ayudando a personas que lo están pasando mal. No solo reparten comida: acompañan, apoyan y están donde hace falta.
Sus bancos de alimentos son un salvavidas real. En situaciones como la DANA, cuando de un día para otro, muchas familias se quedan sin lo básico, Cáritas es de las primeras en estar ahí, con alimentos y ayuda urgente.
¿Por qué participar?
Porque es sencillo, porque hace bien… y porque un kilo no pesa nada, pero sí pesa mucho para quien lo recibe. Si cada uno pone lo suyo, conseguimos un montón. Literalmente.
Así que animamos a las familias a unirse a esta campaña.
Y si alguien duda… recordemos que siempre es mejor llevar un kilo de alimentos al instituto que dejarlo olvidado en el fondo del armario.

